Cambiar Líquido de Frenos
¿Qué es el líquido de frenos?
El líquido de frenos es un fluido hidráulico que transmite la fuerza ejercida en el pedal de freno a los pistones del sistema de frenado de cualquier tipo de vehículo. Cuando pisamos el pedal de freno, ejercemos una fuerza dentro de un sistema hidráulico estanco, haciendo que los pistones que se encuentran en las pinzas de freno ejerzan fuerza sobre las pastillas y estas generen una fricción en el disco, que hace que el vehículo pierda velocidad transformando esa energía en calor. Todo el funcionamiento está basado en el principio Pascal.
Ese calor está presente en el disco, en la pastilla, en el aire y el líquido de frenos. Según su especificación, pueden llegar a altas temperaturas antes de su punto de ebullición, cuando pierden su eficacia. Un DOT 3 o DOT 4 son los usados en turismos convencionales, con temperaturas de 205 ºC y 230 ºC respectivamente.
El líquido de frenos es un fluido higroscópico. Esto quiere decir que absorbe y atrae la humedad del aire, haciendo que puedan existir pequeñas cantidades de agua dentro del sistema, lo que reduce su temperatura de ebullición. Debe ser así para impedir que el agua provoque corrosión o se hiele a bajas temperaturas.
¿Cuándo cambiar el líquido de freno?
La mayoría de fabricantes recomiendan cambiar el líquido de frenos entre 2 y 4 años o entre 60.000 y 80.000km, lo que antes ocurra, ya que a partir de esa fecha su rendimiento empeora. Si se excede un 3% de agua, el sistema de frenos podría verse afectado y tener averías, empeorando la seguridad de todos.
Síntomas que nos avisen de que es necesario cambiar el líquido de frenos:
Si al pisar el pedal de freno notamos que el pedal baja demasiado, es posible que el líquido de frenos no esté en su mejor momento y sea necesario sustituirlo. No obstante, no siempre es la principal causa. Las pastillas de freno gastadas también aumentan el recorrido del pedal. Si tus frenos hacen ruido al frenar es muy probable que necesites un cambio de
pastillas.
Si practicamos conducción deportiva o estamos bajando un puerto de montaña y abusamos mucho del freno, notaremos
que el pedal tendrá más recorrido y será más blando o esponjoso. Esto es debido a que el líquido de frenos ha estado durante mucho tiempo a mucha temperatura y ha dilatado los latiguillos de freno y además ha evaporado ese pequeño porcentaje de agua generando burbujas. A este efecto se le conoce como vaporlock y no es para nada bueno.
¿Cuánto cuesta cambiar el líquido de frenos?
Los datos recabados por ANDRES ZAMORA Talleres, concluimos que el precio medio por el cambio de aceite es de 57,16 euros y que las ciudades donde más barato es esta operación son, por este orden:
- Valencia: 40,34 euros
- Guipúzcoa: 41,92 euros
- Zaragoza: 42,35 euros
- Alicante: 44,16 euros
Por contra, las ciudades más caras para un cambio del líquido de frenos son las siguientes:
- Badajoz: 95,24 euros
- Santa Cruz de Tenerife: 81,04 euros
- Murcia: 78,65 euros
Si nos centramos en las cinco provincias principales de España, el precio medio por un cambio del líquido de frenos es el siguiente:
-
- Madrid: 68,34 euros
- Barcelona: 57,61 euros
- Valencia: 40,34 euros
- Sevilla: 48,20 euros
- Zaragoza: 42,35 euros
¿Qué herramientas intervienen en el cambio de líquido de frenos?
- Gato: para levantar el coche y poder desmontar las ruedas.
- Gafas protectoras: protección ante el líquido de frenos.
- Guantes: protección de las manos ante el líquido de frenos y otros agentes corrosivos.
- 2 jeringuillas: una para extraer el líquido antiguo y otra para introducir el nuevo.
- Recipiente para líquido viejo: para recoger todo el líquido purgado.
- Manguito de goma: para purgar el líquido de frenos.
- Llave cruz: para extraer la rueda del coche.
- Llave fija: para abrir el purgador.
¿Cómo cambiar el líquido de frenos?
- Para cambiar el líquido de frenos, será preciso utilizar un gato para levantar el coche y desmontar las ruedas, unas
gafas protectoras y guantes protectores para protegernos del líquido y otros elementos corrosivos, dos jeringuillas,
una para extraer el líquido viejo y otra para añadir el nuevo, un recipiente para recoger el líquido usado, un manguito de
goma para purgar el líquido de freno, una llave cruz para extraer la rueda y otra fija para abrir el purgador. Para purgar
el líquido, será necesaria también la ayuda de una segunda persona. - Una vez tenemos todo lo que necesitamos, procedemos a realizar el cambio. Lo primero es asegurarnos de que el
coche está aparcado en un sitio llano. A continuación, buscamos el depósito del líquido de frenos en el motor, lo
abrimos y, con una jeringuilla, extraemos el líquido usado. Luego, con una jeringuilla nueva, introducimos el líquido
nuevo. Esta operación habrá que hacerla con relativa rapidez, ya que, si entra mucho aire en el sistema de frenos,
podrían perder su efectividad para un optimo trabajo. - Lo siguiente será quitar las ruedas para purgar las pinzas de frenos. Para ello, usaremos el gato y la llave cruz. Primero
hay que quitar la rueda trasera derecha, luego la trasera izquierda, luego la delantera derecha y, por último, la delantera
izquierda. Es importante seguir este orden. - Después, hay que conectar el bombín del freno con el recipiente. Deberemos localizar un tubo de plástico que sale del
bombín del freno, quitar la protección y conectarlo con el manguito de goma que hemos preparado. El otro extremo
del manguito lo introduciremos en el recipiente donde hemos metido anteriormente el líquido purgado. - Llegados a este punto, necesitaremos la ayuda de otra persona, para que bombee el freno, pisando repetidamente
el pedal del freno sin llegar al fondo. Luego, abriremos el purgador con la llave fija y, a continuación, la otra persona
deberá pisar suavemente el pedal hasta que llegue al fondo. Cuando llegue al fondo, deberá avisar para que cerremos
en ese momento el purgador. Luego hay que repetir este proceso dos o tres veces por cada rueda siguiendo el orden
anteriormente mencionado. - Una vez realizado esto en las cuatro ruedas, comprobaremos el estado del líquido de frenos en el depósito del
motor. Tenemos que observar que el líquido ocupa, al menos, dos tercios de la capacidad del depósito. Si no es así,
tendremos que rellenar de nuevo usando la jeringuilla. - Después, retiraremos el manguito y colocaremos la rueda con la llave cruz. Este proceso se debe repetir con cada una
de las ruedas, siguiendo el mismo orden indicado anteriormente y comprobando, tras colocar cada rueda, el nivel del
líquido de frenos en el deposito.