Cambiar Sensores y Actuadores
¿Qué son los sensores y actuadores de un automóvil?
Un sensor es un dispositivo que se encarga de detectar y transformar magnitudes físicas o químicas en señales o pulsos electrónicos. Podemos encontrar centenares de sensores automotrices que van midiendo todo tipo de magnitudes. Algunas de estas pueden ser: temperaturas, flujo de aire que entra en un motor, distancia de un obstáculo, movimiento, etc.
Un sensor monitorea las condiciones ambientales, como los niveles de fluidos, las temperaturas, las vibraciones o el voltaje. Cuando estas condiciones ambientales cambian, envían una señal eléctrica al sensor, que luego puede enviar los datos o una alerta a un sistema informático centralizado o ajustar el funcionamiento de un equipo en particular. Por ejemplo, si un motor alcanza el punto de temperatura de sobrecalentamiento, puede apagarse automáticamente.
Por otro lado, los actuadores tienen como función proporcionar fuerza para mover o “actuar” otro dispositivo mecánico. Su trabajo es convertir las señales eléctricas desde la unidad de control en una acción controlada. En resumen, se trata de los elementos finales que permiten modificar las variables a controlar en una instalación automatizada.
Un actuador, por otro lado, provoca movimiento. Toma una señal eléctrica y la combina con una fuente de energía para crear movimiento físico. Un actuador puede ser neumático, hidráulico, eléctrico, térmico o magnético. Por ejemplo, un pulso eléctrico puede impulsar el funcionamiento de un motor dentro de un activo.
¿Qué función tienen los sensores y actuadores de un automóvil?
Los actuadores son una parte esencial en la electromecánica de vehículos, y en su mayoría se trata de motores eléctricos y motorreductores, o válvulas electromagnéticas que regulan por ejemplo los sistemas de freno y dirección.
En los últimos años los actuadores han evolucionado en todo tipo de diseños, participando en numerosas tecnologías de seguridad y asistencia a la conducción.
Los sensores del vehículo emplean una información física o química, como por ejemplo, los grados de temperatura o el número de las revoluciones del motor. Filtran esta información y la convierten en datos que se envían a la unidad de control electrónico, de forma que esta pueda comprenderla.
¿Qué tipos de sensores podemos encontrar en un vehículo?
Los sensores del vehículo, también denominados sondas, se pueden clasificar principalmente en dos categorías, según su función y según la señal de salida emitida:
- Sensores destinados a tareas de mando y regulación, como el ABS que gracias al control que ejerce sobre la frenada evita que las ruedas se bloqueen y mantiene la dirección.
- Aquellos que se usan con fines de seguridad. Un ejemplo claro son los sistemas antirrobo.
- Sensores para la vigilancia del estado del vehículo como mantenimiento, como el caso de los que miden la emisión de gases o la presión de los neumáticos.
- Señal analógica, como la del caudalímetro, la presión del turbo, o la temperatura del motor.
- Señal digital, la que indica la conexión o desconexión de determinados elementos, como los impulsos de las revoluciones del sensor Hall.
- Señal pulsatoria, como los inductivos que informan del número de revoluciones y las marcas de referencia.
¿Qué tipos de actuadores podemos encontrar en un vehículo?
- Actuadores manuales. Estos actuadores requieren que un empleado controle engranajes, palancas o ruedas. Aunque son económicos y fáciles de usar, tienen una aplicabilidad limitada.
- Actuadores neumáticos. Estos actuadores usan presión de gas para accionar válvulas. La presión empuja un pistón para afectar el vástago de la válvula.
- Actuadores hidraúlicos. Estos actuadores usan fluido para generar presión. En lugar de usar presión de gas, los actuadores hidráulicos usan presión de fluido para operar válvulas.
- Actuadores eléctricos. Los actuadores eléctricos emplean un motor eléctrico para operar una válvula. Aunque estos actuadores son silenciosos y eficientes, requieren baterías o electricidad, que pueden no estar siempre disponibles en ubicaciones particulares.
- Actuadores de resorte. Estos actuadores retienen el resorte hasta que se produce un disparo. Una vez que se alcanza un umbral particular, el resorte se libera y opera la válvula. Estos se utilizan normalmente en aplicaciones de emergencia de una sola vez.
¿Qué precio tiene cambiar un sensor del coche?
El proceso de sustitución del sensor del cigüeñal es bastante rápido y sencillo, solo hay que localizar el componente, soltar su anclaje y proceder a cambiarlo. El coste del componente depende del modelo de coche y del proveedor, pero, a modo orientativo, pueden oscilar entre los 20-120€.
¿Cómo saber si el sensor del cigüeñal está fallando?
A continuación, le indicamos los indicios más típicos que pueden estar indicando una avería de este componente.
Conviene seguir las recomendaciones que se presentan en cada uno de ellos para resolver la situación de manera efectiva:
- En caso de que se encienda la luz “Check Engine” en el panel de instrumentos del salpicadero, puede estar relacionado con una avería de este sensor. Para confirmarlo, debe realizarse una comprobación utilizando una herramienta de diagnóstico OBD2 en un taller mecánico profesional. El mecánico también puede inspeccionar el módulo de control del motor para averiguar, por el código de error, cual es el problema.
- Los problemas de arranque son otro indicio de avería del sensor de posición del cigüeñal. Cuando el sensor se deteriora, la señal se transmite de manera débil o con errores, lo que provoca fallos de encendido al no producirse la chispa.
- Otra cosa que pasa si falla el sensor del cigüeñal son las sacudidas o acelerones aleatorios. Esto ocurre, por sensor del cigüeñal fallas. También puede calarse el coche mientras conducimos, algo muy peligroso, porque los inyectores no han recibido la orden de inyectar combustible en los cilindros. En estos casos, se debe visitar un taller para sustituir el componente estropeado.
- El empobrecimiento de la aceleración es otro de los indicios de que puede haber un problema con este componente. Notaremos que el coche tarda en acelerar. Una vez más, esto ocurre porque los inyectores están entregando el combustible de manera errónea.
- Problemas con el cambio de marchas. Esto ocurre en algunos modelos de automóvil: una avería de este componente provoca que no se pueda cambiar de marchas, pues el cambio se queda bloqueado en una. La solución momentánea es apagar el motor, esperar y volverlo a encender. Para solucionar el problema de manera definitiva habrá que sustituir el sensor.
- Un mayor consumo de combustible puede ser otro de los indicios de que este componente está fallando. En este caso, ocurre que, por una mala lectura del sensor de posición del cigüeñal. se está inyectando demasiado combustible al motor, haciendo que consuma más innecesariamente.