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Cambiar tubo de escape

¿Cuál es la función del tubo de escape?

El tubo de escape de los motores de explosión es el responsable de descargar los gases de combustión desde el silenciador al exterior del vehículo. Se ubica en la parte trasera o en los laterales inferiores, o incluso de forma vertical.
Es un elemento imprescindible del sistema de escape para reducir el ruido que se produce si el escape no estuviera regulado. Forma parte de la instalación de la misma, junto con los conductos que llegan a la culata, los colectores que van desde la culata al tubo de escape y los silenciadores.

¿De qué material esta hecho un tubo de escape?

Se requiere que el material del tubo de escape sea resistente a altas temperaturas y oxidación, por lo que el acero inoxidable ferrítico se ha convertido en la opción preferida.
Esto se debe a sus características de alta conductividad térmica y bajo coeficiente de expansión térmica, alta resistencia a altas temperaturas al proceso de enfriamiento y buena resistencia a la oxidación y corrosión.
Además de esto, el acero inoxidable ferrítico es un material económico, por lo que se ha convertido en el material principal del tubo de escape.

 

Tubo de escape
Agua tubo de escape

¿Por qué sale agua del tubo de escape?

Si el motor ha estado funcionando durante un tiempo, la temperatura de la línea de escape habrá subido lo suficiente como para evitar la condensación, mientras que la presión y el calor de los gases de escape habrán expulsado y evaporado el agua estancada.

Por lo tanto, cuando el motor está caliente, no deberías ver gotas salir del silenciador, sino sólo ocasionalmente vapor (el típico humo blanco inodoro) si la temperatura exterior es baja.

Si hay una gran cantidad de agua saliendo del silenciador, tal vez turbia o no del todo clara, esto podría ser líquido refrigerante, lo que significaría que la junta de la culata está dañada o que la culata misma se ha agrietado. Estas situaciones permiten que el refrigerante entre al sistema de escape y salga por el final del silenciador.

¿Cuándo cambiar el tubo de escape?

La mayoría de las veces, al cambiar un tubo de escape afectado por oxidación, se deben cambiar todas las piezas conectadas. El silenciador trasero debe sustituirse cada 80 000 km aproximadamente, mientras que el catalizador, cada 100 000 km. El tubo de escape, al igual que el resto de elementos, está expuesto a oxidarse, agrietarse y perforarse.

Un consumo excesivo de combustible, ruidos inusuales o el olor a gasolina pueden ser síntomas de una línea de escape defectuosa. Se recomienda comprobar la sujeción del sistema agitando el tubo para detectar posibles desperfectos.

En resumen, deberemos plantearnos cambiar o limpiar el tubo de escape si:

  1. Hemos superado los 80.000 kilómetros sin limpiar. O ha llegado al final de su vida útil
  2. Ha sufrido daños por un accidente
  3. Visualmente se ve deteriorado
  4. Se han superado limites legales de contaminación
  5. Se nota una pérdida de potencia del vehículo
  6. Huele a gas de escape en el interior del coche
  7. La conducción es incómoda y con mucho ruido en el motor
  8. Exceso de agua en el tubo de escape
Humo negro tubo de escape
Humo blanco tubo de escape

¿Por qué sale humo blanco del tubo de escape?

El humo blanco espeso que sale del escape puede indicar que el refrigerante o el agua han ingresado a la cámara de combustión, algo que nunca se debe permitir. Cuando el refrigerante o el agua son quemados dentro del motor, se genera un humo blanco espeso que sale por el tubo de escape.

Esto no es recomendable, ya que podría causar grietas en partes clave del motor, como la culata, la junta de la culata o los bloques del motor.

Estas grietas, incluso siendo pequeñas, pueden empeorar si se retrasa la sustitución del componente afectado. Además, también se puede provocar la contaminación del aceite del motor o un sobrecalentamiento del motor, lo cual acarrearía la necesidad de reemplazar el motor completamente averiado, con un costo mayor y con la ayuda de profesionales.

¿Por qué cambiar el tubo de escape?

Un fallo en el tubo de escape puede tener graves consecuencias en la comodidad, seguridad, economía y el medio ambiente. El consumo de combustible aumentará y se emitirá un sonido metálico extraño durante la aceleración. También se pueden producir fugas de gases dentro del habitáculo, lo que supondrá un gran riesgo.

Por tanto, si cuentas con algunos de los problemas que hemos comentado o simplemente sientes que tu tubo de escape necesita una revisión. Puedes confiar en el equipo de profesionales de Andrés Zamora Talleres para llevar tu vehículo. Puedes pedir cita a través del siguiente enlace o mediante las funciones de google maps.

¿Para qué sirve cambiar el tubo de escape? ¿Cuáles son los beneficios de cambiar el tubo de escape?

Cambiar el tubo de escape de nuestro vehículo tiene ventajas significativas para el buen rendimiento de nuestro coche así como otros aspectos a tener en cuenta en el día a día.

Como lo son por ejemplo:

  • Mejor experiencia de conducción, más fina, suave, sin traqueteos.
  • Reducción del ruido.
  • Aumento de la potencia del vehículo y un mejor rendimiento del motor gracias a la optimización del flujo de gases.
  • Emisión de contaminantes más reducida. El cumplimiento de la normativa de emisión es esencial para pasar la ITV y para no ser multado si hay un control sobre esta cuestión en carretera.
  • Menor consumo de combustible.
Mecánico arregla un tubo de escape
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